Cansado de ser carne,
desapareciendo, agudizándose.
Carne envejeciendo.
Cansado estoy de ser huesos,
que frotan huesos,
molestia y dolor.
Cansado, me siento...
me siento en mis carnes
y huesos amorfos
día a día, segundos...
mientras las noches se ocultan en sus tristes albas,
en un espíritu que no despierta,
en la carne que no se mueve,
en los huesos que sólo pesan.
El polvo se volará y
el espíritu no volverá.